Esta ruta circular, de 18,46km y dificultad media, transcurre por dos de los núcleos interiores que forman parte de Vandellòs, como son Masboquera y Masriudoms. También llega hasta Castelló, un pueblo abandonado en los años cincuenta del siglo pasado y que hoy es conocido por la recuperación para usos educativos, culturales y lúdicos que ha hecho la Asociación Masía de Castelló y el pesebre viviente que se emplaza durante el invierno.